Siguiendo con el tema de las Desventajas de la Educación en Familia desde mi punto de vista, pienso que es necesario agregar a la lista:
El papel que juegan las propias e individuales inseguridades en nuestra vida como familia educadora.
Debido a que esta opción educativa es nueva y en su mayor parte fuera de la norma en las sociedades en donde vivimos, no contamos con puntos de referencia que nos ayuden a fácilmente identificar el camino que debemos tomar para lograr el resultado que deseamos en la educación de nuestros hijos.
Nuestras inseguridades juegan un papel muy importante cuando tratamos de encontrar ese camino que más concuerda con nuestra filosofía educativa:
- Cuando decidimos a utilizar determinado método.
- Cuando nuestros hijos ignoran algo que en la escuela regular ya han aprendido.
- Cuando vemos que otros niños de la misma edad ya saben leer, multiplicar o hacer tal o cual cosa.
- Cuando nos enfrentamos con esas etapas en que el aprendizaje parece que no está ahí.
- Cuando vemos que lo que estamos aplicando en la educación de nuestros hijos simplemente no está funcionando para ellos en particular.
La buena noticia es que los niños siempre aprenden, y que estas inseguridades pasan en un par de años cuando logramos encontrar nuestro lugar ideal para aprender juntos. Para aquellos que educamos en familia, los resultados que vemos en nuestros hijos después de haber pasado por todas esas inseguridades, bien valen la pena. En la Educación en familia TODOS aprendemos.
Las comparaciones son odiosas, pero es que además he visto que entre los padres son peor aún. ¿Quién no ha tenido esas típicas charlingas de parque en que coincides con alguien que no conoces de nada, y sólo porque ambos tenéis niños pequeños, os ponéis a hablar? El tema es casi siempre: ¿y ya anda? ¿ya toma papilla? ¿ya habla? ¿ya va al colegio? ¿todavía lleva pañales? Es una especie de competición entre personas con inseguridades, o quizás una forma de asegurarse de que su hijo es "normal" y que "no va retrasado" en su desarrollo. Inseguridad, al fin y al cabo.
Con la educación es igual, ¿no? Pero es normal, unos niños aprenden antes unas cosas que otras, y en algunos casos ni las aprenden. Yo sería incapaz de aprender sobre bricolaje, porque no me interesa nada. Pero las cosas básicas de la vida, más o menos las conozco, y si necesito saber algo en concreto (como desatascar un fregadero), pues lo intento aprender. Con los niños es igual, con el hándicap de que los primeros años de su vida prefieren el juego a lo que los adultos pensamos que van a necesitar en su vida futura.
Fin.del.rollo.
1beso.
Muy cierto Maria. Las inseguridades han de tener su raiz mayormente en la necesidad que tenemos los padres de que saber que nuestro hijo es normal, o un poquito mejor que normal, jeje.
Lo irónico de la situación es que como dices, no todos los niños son iguales. Pero igual, que no se trata de los niños sino de nuestras inseguridades ombre. ;-)
Saludos desde una casa que se niega a permanecer limpia. ¡Grrr!
Es un rollo, yo a temporadas lo he pasado mal, pues como decís las dos muy bien, en el fondo todas queremos nenes "mejor de lo normal", ya que nos dedicamos tanto a ellos..Y de repente los nenes no se interesan por los juegos educativos, ni por el libro que tu crees que deberiais leer, ni por aprender a escribir. Sólo quieren jugar y hacer un paracaídas de verdad.......
!Que difícil me resulta lo de respetar su ritmo! Yo estoy con la obsesión de la lecto-escritura y me dicen: aprenderá, todos lo hacen..y yo confio pero a veces...esas inseguridades nuestras nos traicionan. Gracias Yenia por compartir estas desventajas, yo que pensaba que era la única.....
Hey Paloma,
Todo lo que dices es tan real. Nosotras mismas podemos llegar a ser un obstáculo para la educación de nuestros propios hijos. Lo bueno es que lo sabemos, y podemos corregirnos y mantenernos bajo vigilancia en ese punto.
Una larga posdata...
Hay niños que aprenden a leer por sí mismos hasta los 12 años, pero he leído por ahí que en un par de meses pueden leer el mismo tipo de material y a la misma altura que los demás chicos de su misma edad que han comenzado a leer desde sus primeros años.
Recordemos también que el propósito de la lectura es UTILIZARLA como un instrumento más en el aprendizaje. No debemos dejar pensar a los niños que el aprender a leer es La Meta.
No me recuerdes lo de los doce años que ya lo se, ja,ja...Si veo que la cosa se va a alargar tanto me voy a vivir a una isla desierta. Por cierto ¿conoces alguna?....
jajaja, ya se. El escándalo del siglo.
Esperemos que cuando nuestros hijos eduquen a los suyos, estas cosas sean los cuentos de terror que les contamos nosotras las ancianas jeje. Hay que abrir camino, ni modo.