Fundada por la primera mujer en Italia que se convirtiera en médico, la filosofía Montessori adquiere su nombre de su fundadora, María Montessori. Con estudios además en psiquiatría, educación y antropología, la señora Montessori se dedicó a hacer una disciplinada investigación científica para responder a la eterna pregunta: ¿Y como es que realmente aprenden mejor los niños?
Sus descubrimientos la llevaron al desarrollo de su filosofía y método, que son utilizados alrededor del mundo a diferentes niveles en un amplio espectro.

Durante su investigación, Montessori encontró que el aprendizaje se lleva a cabo a través de todos los sentidos, y no tan solo al escuchar, observar o leer; por lo que en su método el ambiente en el que se desenvuelve el niño es de suprema importancia ya que las impresiones que éste haga en el niño no tan solo se registran en su mente sino que contribuyen a su formación.
La señora Montessori observó también, que todos los niños pasan por periodos en los que sus sentidos se agudizan y esto es lo que les lleva a experimentar esos periodos que vemos, en los que viven una intensa concentración durante determinada actividad. Es entonces durante esas fases, cuando el niño repite una y otra vez una actividad hasta obtener alguna medida de satisfacción con la manera en que ha realizado su trabajo.

Los niños que crecen en esta filosofía son guiados por sus propios intereses, aprenden a su propio tiempo y de la manera en que ellos eligen por medio de un ambiente concienzudamente preparado para tal propósito. Los papeles de instructor y aprendiz son ocupados ambos por el niño; quien camina hacia la independencia en todos los aspectos de la vida diaria diciendo desde sus primeros años como preescolar: "ayúdame a hacerlo por mí mismo".

El papel de los padres Montessori es principalmente el de mantener ese ambiente que nutre a sus hijos como algo organizado, disciplinado y bello que está preparado para ser explorado por las manos de un niño que necesita satisfacer una necesidad espiritual por medio del aprendizaje, para desarrollarse sin necesidad de utilizar la fuerza (léase enseñar).
Los padres intentarán seguir los intereses de los niños y al propio niño en su desarrollo evitando las interrupciones que tienen por intención la enseñanza en cualquiera de sus formas y que coartan la concentración de su hijo.

Como parte de ese ambiente que representa el corazón de esta filosofía hay materiales Montessori diseñados específicamente para utilizar con su método. Montessori postula que el ambiente en que se desarrollan y desenvuelven los niños es tan importante que ocupa el segundo lugar junto a la vida misma, pero al mismo tiempo aclara que éste no puede crear algo que no está ahí, pero tan solo ayudar o estorbar.

Es entonces con una metodología específica que se aplica esta filosofía Montessori, y no tan solo en cuanto al ambiente que rodea al niño sino en otras áreas también.

La estructura en este método es importantísima aunque intenta que la libertad del niño prevalezca. La intención es sacar a la superficie de una manera natural lo mejor que cada ser humano ya trae consigo desde su nacimiento y esto se intenta lograr por medio de la belleza, la disciplina, la limpieza y la organización; haciendo conexiones entre lo concreto, y avanzando hacia lo más abstracto.

Todo lo contrario a esto se debe evitar en casa.
Lo confuso, amontonado y feo se debe descartar.
Los materiales naturales reemplazarán los plásticos y demás productos artificiales.
El lenguaje y forma de expresión deben ser sencillos, honestos y propios.
La televisión y las computadoras deben evitarse especialmente con los más pequeños.
Una buena dieta y ejercicios se deben desarrollar con la individualidad en mente.
La competencia se elimina y se reemplaza por la aceptación y la tolerancia del niño mismo y de quienes le rodean.


Porque la filosofía Montessori propone que los niños entre 3 y 6 años aprenden de una forma espontánea y sin esfuerzo alguno, la edad ideal para comenzar con la aplicación del método es la de 3 años, edad en la que se les da a los niños la oportunidad de encontrar sus propias motivaciones y auto-disciplinarse. La disciplina se introduce con libertad para el hacer e independencia utilizando solo premios y aboliendo toda presencia del castigo en cualquiera de sus formas externas. Al niño se le permite adquirir responsabilidades y ejercitar su libre elección.

Para encontrar escuelas aplicando este método, y materiales para utilizar basta con realizar una búsqueda en Internet ya que hay muchos recursos disponibles en Español.

2 interesantes comentarios

  1. Anónimo // miércoles, noviembre 08, 2006 8:19:00 p.m.  

    a mí me gusta mucho la filosofía y los materiales Montessori. Lo que me resulta más difícil es lo de mantener todo "ordenado y bello", ja, ja. Algunos materiales se pueden construir con facilidad, que es lo que nosotros hemos hecho con algunas cosas.
    gracias por incluir esta información en tu blog, siempre tan útil e interesante.
    Azu

  2. Educando en Familia // lunes, noviembre 13, 2006 12:13:00 p.m.  

    Hey Azu,
    No había visto tu comentario. Si, a mí también me agradan muchas cosas de éste método. No he tenido tiempo de checar los materiales, pero será interesantísimo saber sobre tu experiencia y recomendaciones con lo que has experimentado.
    No he visto nada en tu página, hoy busco más detenidamente.
    Saludos!